Mateo 14:25 “Más a la cuarta vigilia de la noche, Jesús vino a ellos andado sobre el mar”
A menudo, nosotros tememos que nos lleguen situaciones a nuestras vidas como, enfermedades, dolores, pesares; pero estas situaciones son para que nosotros descubramos que todas esas situaciones nos llevan más cerca de Dios, porque es cuando nos sentimos desamparados y corremos a él en su ayuda. Dice el texto que Jesús fue a la cuarta vigilia de la noche, esto quiere decir que el Señor Jesús fue cuando él lo considero necesario.
Jesús fue a ellos caminando sobre el mar porque él tiene el control absoluto de todas las cosas creadas. Este evento demuestra el poder del Señor sobre el mundo material, su poder sobre la creación. Para Cristo no hay nada imposible, y todo cuanto quiso ha hecho, no hay cosa creada que no esté bajo su dominio, porque todo le sirve a él (Colosenses 1:16).
Y ese Dios que creo los cielos, la tierra y que creo el mar; ese Dios que levanto a Lázaro de la tumba, es el mismo que fue caminando sobre el mar, para mostrar a sus discípulos que aquello a lo que ellos temían, esa gran tormenta, era solo un medio para que Jesús llegara a ellos.
Los vientos, las situaciones difíciles, solo son sirvientes del Señor, no pueden moverse sin su permiso. Por eso dice su palabra en Salmos 93:4 “Jehová en las alturas es más poderoso que las muchas aguas, más que las recias ondas del mar”.
Cuando te encuentres en enfermedades, en problemas financieros, en problemas con la familia, en situaciones difíciles, clama al Señor. En 2 Corintios dice que hubo un momento en la vida de Pablo “que fue abrumado en gran manera, más allá de sus fuerzas, que perdieron la esperanza de conservar la vida”. Pero fue para que no confiara en el mismo, sino en Dios.
Cuando estés en situaciones difíciles recuerda que no estás solo, que Cristo está contigo; y así como espero con los discípulos hasta la cuarta vigilia de la noche, así lo va hacer en tu vida, no te dejara solo, el vendrá.