Mateo 28:19 “Por tanto, id y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo”
El cristianismo no solo consiste en congregarse y recibir Palabra de Dios, sino también en llevar fruto, mucho fruto (Juan 15:8), tal cual nos enseña la Biblia. ¿Recuerdas lo que le pasó a la higuera? (Mateo 21:19). El Señor Jesús vino a ella esperando encontrar fruto, pero solo vio un árbol con hojas, cero frutos, y fue maldita hasta el día de hoy.
No solamente basta con congregarse, hay otras cosas más que debemos hacer como cristianos, dentro de las cuales están: orar (1 Tesalonicenses 5:17), leer la Biblia (Josué 1:8), y la Gran Comisión (Mateo 28:19). Ser cristiano también consiste en servir a otros, y en servirle al Señor con los talentos que nos ha dado. La Biblia nos enseña en 2 Timoteo 3:16 que, “toda la Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia”. El libro número uno que necesitas para conocer a Dios y su plan para el hombre es la Biblia, pues es útil para enseñar. Como puedes ver, es muy importante que empieces a formarte, para que luego tú también lleves frutos y puedas discipular a otros. Fuiste llamado para servir, no para estar sentado en una silla todo el tiempo. Sal de tu zona de confort, permite que el Señor te incomode. No es tan difícil cumplir con las cosas que el Señor quiere que hagamos para él, basta con tomar una decisión radical y empezar a hacerlo.