Iglesia Cristiana Hashem

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«En Integridad y Sabiduría»

Estudio Bíblico (Martes, 5:00 PM)   |   Culto de Confraternidad (Domingos, 12:00 PM)

Series Activas: «En camino a un avivamiento» Libro de Zacarías (Martes) y «La Iglesia impulsada por la Biblia» (Domingos)

El orgullo y la ansiedad

1 Pedro 5:5-7 “Igualmente jóvenes, estad sujetos a los ancianos; y todos sumisos unos a otros, revestíos de humildad; porque: Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes. Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios para que él os exalte cuando fuere tiempo; echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros”.

Pedro nos dice que el creyente debe revestirse de humildad; como si fuese una especie de uniforme para que el mundo nos reconozca.

En vez de asumir la postura del soberbio y del orgulloso, y de ir por la vida demandando que todo el mundo te trate de cierta manera; más bien debes humillarte bajo la poderosa mano de Dios. La humildad te lleva a descansar en Dios, pues el descanso en Dios es un remedio para la ansiedad. Mira lo que dice Salmos 37:5 “encomienda a Jehová tu camino y confía en él y él hará”. Filipenses 4:6-7 dice: “Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios, en toda oración y ruego con acción de gracias”. Nota que dice que con oración, no con afán.

Así como la oración y la humildad caminan de la mano, lo mismo podemos decir del orgullo y de la ansiedad. El orgulloso se rehúsa a confiar en Dios, porque él quiere todo el mérito. Mateo 11:29 nos dice: “aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallareis descanso para vuestras almas”.

Muchos rechazan la humildad porque la consideran una debilidad humana, pero la Biblia la presenta como una fortaleza moral. Porque el hombre humilde posee la capacidad de levantarse por encima de las circunstancias más adversas, pues él sabe quién es delante de Dios y sabe quién es el Dios que tiene delante.

El hombre humilde tiene suficiente fortaleza moral para seguir siendo cuerdo, aunque el mundo a su alrededor se haya vuelto loco.