Tito 2:3-5 “Las ancianas asimismo sean reverentes en su porte; no calumniadoras, no esclavas del vino, maestras del bien; que enseñen a las mujeres jóvenes a amar a sus maridos y a sus hijos, a ser prudentes, castas, cuidadosas de su casa, buenas, sujetas a sus maridos, para que la palabra de Dios no sea blasfemada”.
La palabra que Pablo utilizo para referirse a: “puras”, es “hagnos”, que significa: puro, casto, libre de contaminación, santo. Esta debe ser una característica que destaque a la mujer cristiana.
Es un llamado a las mujeres a vivir de manera que refleje la santidad de Dios en su vida. Un llamado a mostrarles a otros que la nueva vida con Dios significa vivir de manera diferente. Se trata de vivir una vida santa, para que refleje que ya no eres lo que antes fuiste, y esto solo por su gracia.
Tito 3:3 dice: “porque nosotros también éramos en otro tiempo, insensatos rebeldes, extraviados, esclavos de concupiscencias y deleites diversos, viviendo en malicia y envidia, aborrecibles, y aborreciéndonos unos a otros”.
Eso eras antes, en otro tiempo. Pero la gracia de Dios ha re direccionado tu vida. Cristo te ha dado una nueva vida, y has sido renovada y regenerada para vivir de manera diferente.
Has sido elegida desde antes de la fundación del mundo para que fueras santa y sin mancha delante de él. “Eres pueblo adquirido por Dios, para mostrar las virtudes de Aquel que te llamo de las tinieblas a su luz admirable” (1 Pedro 2:9)
Que Dios te ayude a vivir la vida de manera que él sea glorificado.