Juan 14:6 “Jesús le dijo: Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre, sino por mi”.
El reino de los cielos invita a todo tipo de personas, Dios no limita la invitación a su reino, pero él si espera que haya un cambio en tu vida a medida que te acerques a él. Tú puedes llegar a Dios tal como eres, pero en el proceso tienes que seguir algunos consejos para que él te perfeccione y para esto, él nos ha dejado un manual para conocer su perfecta voluntad para nuestras vidas; esta es: “La Biblia”.
Al mirar la Biblia, nos damos cuenta que creer en Dios no es suficiente. Para acercarte a Dios no solo tienes que creer que el murió por tus pecados, sino también aceptarlo como Señor; como amo y dueño de tu vida. Este es el problema de millones de personas; saben que Dios existe, pero no quieren hacerle el dueño de sus vidas, no se quieren someter a su reino.
La Biblia nos dice que “el que está en Cristo nueva criatura es” (2 Corintios 5:17), también nos dice: “Y los que viven según la carne, no pueden agradar a Dios” (Romanos 8:8). De manera que es imposible ser salvo, con simplemente creer en Dios y seguir viviendo a mi manera.
Para acercarnos a Dios y ser salvos hay un solo camino, y este es: Jesucristo, no es a nuestra manera, es a través del Hijo de Dios. Dios nos ha trazado un camino a través de Jesucristo, haciéndole nuestro dueño y nuestro Señor, santificándonos para él diariamente, obedeciéndole en su Palabra, congregándonos con otros hermanos nuestros y clamando a él en todo momento.
Atrévete a dejar tu orgullo, humanidad y señorío a un lado y permítele a Jesús ser el Señor totalmente de tu vida.